Inaugurado a finales de agosto del 2010, el proyecto está ubicado en el punto más alto de Puerta de Tierra, en la Avenida Constitución 404. Éste es un proyecto desarrollado por Swiss Chalet, Inc. y las ventas y mercadeo a cargo de Terranova Realty. Contratista General: Desarrollos Metropolitanos, L.LC. El diseño arquitectónico ha sido desarrollado por los arquitectos, Lorenzo Ramírez de Arellano, Ricardo Le-Franc y Salvador Alemañy, de la firma LRA. El diseño de interiores estuvo a cargo de Mabel Mangual. Los precios de inauguración de las unidades típicas comienzan en los $175,000 hasta los $500,000, en las unidades más grandes.

La firma Swiss Chalet, Inc., una empresa pública fundada en 1951, fue comprada y privatizada en julio de 2001 por cuatro inversionistas locales. El grupo fue formado inicialmente por Pedro Feliciano Benítez, propietario de Las Piedras Construction Corporation y sus numerosos afiliados y subsidiarias. B. Fernández & Hermanos Inc.. una de las más antiguas compañías mayoristas y distribuidores de alimentos de mayor éxito y JP McCloskey, un desarrollador de bienes raíces con amplia experiencia en rascacielos residenciales, de oficinas y desarrollos turísticos. Poco después de la transacción inicial, Arnaldo Benus, un conocido hotelero local se unió al grupo.

Una hermosa y moderna fuente, con una caída continua de agua, le da la bienvenida a todos aquellos que llegan a Atlantis. Por su parte, el moderno y amplio vestíbulo, finamente decorado al estilo minimalista, sienta la tónica de la elegancia y el buen gusto de Atlantis. Su moderna entrada le da cuenta del cuidado con que se escoge cada terminación. Enseguida el vestíbulo lo confirma con sus pisos en madera, sistema de iluminación directa e indirecta que combina "lead" color azul y fibra óptica, esculturas del reconocido artista Carlos Guzmán y una lámpara fabricada en Canadá que inmediatamente capta la atención.

Una moderna arquitectura, espaciosos pasillos y techos altos son sólo algunas de las características de este gran proyecto, donde los desarrolladores cuidaron cada detalle y no escatimaron en la calidad de los materiales, y mucho menos en las terminaciones, que son, sin duda, de primera. Con acceso controlado, servicio de conserjería y "valet parking" las 24 horas para todos sus inquilinos, Atlantis le brinda una sensación única de espacio y amplitud desde cada uno de sus 169 apartamentos, que distribuidos en 25 pisos, ofrece impresionantes vistas de una belleza tan incomparable que resulta difícil de explicar.

Atlantis cuenta con una arquitectura única, comparable a aquellas que se encuentran en las más modernas metrópolis, con amplios ventanales en cristal, de techo a piso, para una vista sin interrupciones, y un espacio interior abierto que permite distribuir el área según sus necesidades y gustos. Según J. P. McCloskey, socio desarrollador de Atlantis, "este increíble concepto de vivienda se desarrolló con la idea de crear un concepto distinto de apartamentos, diseñados para que cada persona pueda dividir su interior como mejor se ajuste a sus necesidades".
 

El edificio cuenta con una moderna "área de entretenimiento" con baño privado y cocina para uso exclusivo de los inquilinos en sus actividades privadas, así como un amplio y acogedor centro con acceso a Internet, perfecto para aquellos que trabajan desde su hogar y desean tener un espacio de reunión donde invitar a clientes. Asimismo, el edificio cuenta con un espectacular gimnasio, y espacio para aeróbicos para uso diario de los propietarios. Con techos de más de 9 pies de altura, en concreto crudo, tal y como dictan las últimas tendencias en arquitectura, cada apartamento es un espacio abierto a la imaginación. El último piso, destinado a cuatro unidades tipo penthouse de dos niveles, es simplemente alucinante. Hasta el 2010 no hay nada más alto que el Atlantis en el área de Puerta de Tierra y nada que se interponga ante su vista. Entre otros atractivos, Atlantis cuenta con 60 espacios de estacionamiento para visitantes, el cual es interior para mayor seguridad, así como aire central, planta eléctrica y cisterna para todo el edificio.

Ref.
El Nuevo Día
28 de agosto de 2010