El antiguo Instituto Oftálmico de Puerto Rico, fue inicialmente
establecido en 1937 por los doctores Luis J. Fernandez Garcia and
Ricardo F. Fernandez en el Viejo San Juan. El Dr. Luis J. Fernández
García, graduado de la University of Maryland School of Medicine en
1917, desempeñaba el cargo de director y jefe de cirujanos, mientras el
Dr. Ricardo J. Fernández, graduado de la George Washington University
School of Medicine, Washington, D. C. en 1931, ejercía como cirujano
asistente. En el 1939 la instalación hospitalaria fue trasladada a un
nuevo edificio levantado en Puerta de Tierra. La edificación de cuatro
pisos tuvo un costo de $70,000. El complejo ocupa un área que se
extiende desde la avenida Constitución hasta la calle san Agustín.
El edificio constituye uno de los ejemplos más representativos del Art
Deco en la Isleta de San Juan. Sobre el pórtico de entrada se destaca un
motivo en terracota que muestra una de las características más
reconocibles del estilo Art Deco: el sol, emergiendo sobre el horizonte
del mar, con sus rayos estilizados, radiantes y geométricos. En el
dintel se aprecian algunas elementos reconocibles de este estilo, las v
invertidas formando líneas rectas en zig zag y ornamentaciones florales.
El ala sur, hacia la calle San Agustín, presenta los peculiares
ventanales circulares, que evocan las claraboyas de los barcos. La
fachada en general proyecta una sensación de solemnidad, la impresión de
estar frente a un gran templo.
Entrada principal. Avenida Constitución núm. 160 |
En la planta baja se ubicaban las oficinas administrativas, en el
segundo piso un quirófano y cuartos privados, en el tercero salas de
convalecencia y en el cuarto las viviendas para el personal residente.
En el sótano se encontraba un dispensario para el despacho de recetas.
En el 1966 el Instituto cualificó para ofrecer los servicios de Medicare
y Medicaid. Para el 1988 el total de camas disponibles en el hospital
ascendía a 48. Los pacientes recibían la atención de siete enfermeras
graduadas y tres enfermeras prácticas. La institución empleaba a otras
trece personas para su operación. El dispensario estaba a cargo de
un farmaceútico licenciado. El hospital contaba además, con un banco de
sangre.
En la actualidad -2010-, el edificio que una vez albergó lo que en su
época llegó a ser considerado como el más avanzado centro clínico para
el tratamiento de afecciones oculares, no solo de Puerto Rico, si no en
todo el Caribe, se encuentra desocupado y abandonado.
Ref.
- Archives of Ophthalmology, Vol. 22 No. 4, October 1939
American Medical Association
- Hospita-Data.com
Hospital and nursing home profiles |
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