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Instituto Oftálmico de Puerto Rico. Año 2010


El antiguo Instituto Oftálmico de Puerto Rico, fue inicialmente establecido en 1937 por los doctores Luis J. Fernandez Garcia and Ricardo F. Fernandez en el Viejo San Juan. El Dr. Luis J. Fernández García, graduado de la University of Maryland School of Medicine en 1917, desempeñaba el cargo de director y jefe de cirujanos, mientras el Dr. Ricardo J. Fernández, graduado de la George Washington University School of Medicine, Washington, D. C. en 1931, ejercía como cirujano asistente. En el 1939 la instalación hospitalaria fue trasladada a un nuevo edificio levantado en Puerta de Tierra. La edificación de cuatro pisos tuvo un costo de $70,000. El complejo ocupa un área que se extiende desde la avenida Constitución hasta la calle san Agustín.

El edificio constituye uno de los ejemplos más representativos del Art Deco en la Isleta de San Juan. Sobre el pórtico de entrada se destaca un motivo en terracota que muestra una de las características más reconocibles del estilo Art Deco: el sol, emergiendo sobre el horizonte del mar, con sus rayos estilizados, radiantes y geométricos. En el dintel se aprecian algunas elementos reconocibles de este estilo, las v invertidas formando líneas rectas en zig zag y ornamentaciones florales. El ala sur, hacia la calle San Agustín, presenta los peculiares ventanales circulares, que evocan las claraboyas de los barcos. La fachada en general proyecta una sensación de solemnidad, la impresión de estar frente a un gran templo.
 


Entrada principal. Avenida Constitución   núm. 160

En la planta baja se ubicaban las oficinas administrativas, en el segundo piso un quirófano y cuartos privados, en el tercero salas de convalecencia y en el cuarto las viviendas para el personal residente. En el sótano se encontraba un dispensario para el despacho de recetas. En el 1966 el Instituto cualificó para ofrecer los servicios de Medicare y Medicaid. Para el 1988 el total de camas disponibles en el hospital ascendía a 48. Los pacientes recibían la atención de siete enfermeras graduadas y tres enfermeras prácticas. La institución empleaba a otras trece personas para su operación. El dispensario estaba a cargo de un farmaceútico licenciado. El hospital contaba además, con un banco de sangre.

En la actualidad -2010-, el edificio que una vez albergó lo que en su época llegó a ser considerado como el más avanzado centro clínico para el tratamiento de afecciones oculares, no solo de Puerto Rico, si no en todo el Caribe, se encuentra desocupado y abandonado.

Ref.
- Archives of Ophthalmology, Vol. 22 No. 4, October 1939
  American Medical Association
- Hospita-Data.com
  Hospital and nursing home profiles