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Lew Burston quiere él mismo inspeccionar los vendajes que se le ponen a Montañez y de paso le dice no maltrate a sus chatas porque terminará por no encontrar quien quiera hacerle guantes.
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Por DON Q
Si fuéramos a juzgar la concurrencia en el Escambrón la noche del cuatro de julio por el contingente de fanáticos que a diario acude a los entrenamientos en aquel parque, necesariamente tendríamos que aceptar no habría local para acomodar a todos los que allí, desde los cuatro puntos de la isla, habrán materialmente de volcarse.
Pero si quisiéramos ser más exactos en los cálculos adelantados de entrada, no tendríamos sino interrogar a Pablito Albanese en el "Sport Shop", cómo va la venta de boletos, y siempre resultaríamos abrumados por el peso incalculable de los números.
La empresa se ha visto precisada a pedir la ayuda policíaca a fin de evitar cualquier contingencia durante los entrenamientos. El hecho de que éstos sean gratis y que nuestra turbamulta estudiantil goce actualmente de sus vacaciones, hace crecer día tras día el número de los espectadores gratuitos al parque.
Esto sin embargo le da cierto colorido de antemano a las peleas y hace trabajar a gusto a los boxeadores incluidos en el programa. Los aplausos se suceden y tal pareciera como si realmente gozáramos una función boxística en regla.
Pero cuando los entusiasmos llegan al paroxismo, es cuando nuestro campeón sin corona sube al cuadrilátero. Una orquesta improvisada entona como himno triunfal al "Terror de Campeones( una "plena", muy en boga hoy en Nueva York: "Montañez, el Torito Cayeyano"... Y mientras todos quieren saludar a Peyo, vemos sufriendo a Mr. Burston y Luisín, tratando por todos los medios de evitar le ocurra al ídolo cualquier accidente, que se ensayó cargarlo en hombros el pasado martes después de su entrenamiento en el curso del cual, al zafársele la derecha, noqueara a Young Tony Canzonery.
Y sin que esto sea "balijú" ni medio de publicidad, podemos asegurae sin temor a equivocarnos, que jamás desde que en nuestra isla se practica el boxeo, mayor concurrencia haya acudido a los entrenamientos como la que actualmente se congrega en el parque del Escambrón para ver en acción a Pedro y su próximo contrincante, Frankie Wallace; Víctor Valle, el mago del estilo, y José Lago "Fogonero" nuestro indiscutible campeón de los plumas.
Como bien se puede apreciar, todos los protagonistas de la gran velada están en plenas formas y listos para subir al "ring". Así también las obras que se han llevado a cabo en el parque para acomodar a los espectadores que esa noche habrán de acudir. Queremos recalcar, por ser de gran importancia para la perfecta visualidad de los asistentes, que el cuadrilátero se ha levantado sobre el "home-plate" y no sobre la segunda basecomo en anteriores peleas. Esto presta más comodidad, ya que existe la misma distancia a los 'stands" y graderías. En cuanto a los "ringsides"' es de todos sabido que son los más agraciados, porque también son los que mejores pagan... La puerta de entrada para las graderías, lo será por el portón pequeño que da frente a los ranchones de la PRRA. Para entrar a "ringsides" se abrirá la puerta única que da hacia el lado del "Escambrón Beach Club". Los concurrentes a palco, grandstand y butacas centrales a grandstand , lo harán como usualmente, por la puerta principal del estadio.
Se han tomado providencias para evitar la aglomeración de revendedores de boletos y curiosos en los alrededores de las puertas de entrada. Debido a la gran demanda de localidades, el sábado se abrirán a las 9:00 A. M. las taquillas expendedoras de boletos y se cerrarán a las seis de esa tarde. El domingo permanecerán abiertas.
El estadio ese día se abrirá al medio día, de manera que séan innecesarias las filas para entrar.
Y como las guaguas torcerán su ruta acostumbrada pasando frente al parque, esto dará comodidad a los vecinos todos de la Capital y pueblos limítrofes como Cataño y Bayamón.
En fin, que nada habrá de perturbar el buen orden esa noche y habrá plena seguridad para todos los asislentes, lo mismo en gradas, como en "ringsides" y grandstand.
Hoy viernes darán todos por terminados los ejercicios de entrenamiento . El sábado descansarán, y el domingo por la mañana habrán de personarse en las oficinas de la Comisión de Recreo y Deportes para subir a la báscula. Luego el esperar la hora de dar inicio al espectáculo y cargar cada cual con los laureles de la victoria. Eso sí, Montañez y Wallace subirán al 'ring" exactamente a las diez de la noche. Es la innovación introducida por Luisín en los programas de boxeo en la isla, ha sido del agrado de todos y por lo tanto hay que seguirla.
No habrá,—¡que no puede haber!,—quien sintiéndose boricua esa noche, no haya de acudir a rendir tríbuto de admiración a nuestro más alto valor boxístico. Es deber de todo portorriqueño.
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