Noticias - Artículos

Inicio - Home

 

Noticias 1938

 

  El Mundo
lunes 25 de abril de 1938 p.10 

EL P. DE LA C. NUMERO 686
Proyecto de la Cámara de Representantes para la
construcción de un gimnasio olímpico

Por Arturo Gigante 
 

Escrito así, en iniciales, tal como figura a la cabeza de estas líneas, los signos que hace tantos siglos inventaron los hombres para poder expresar sobre el papel o la piedra el lenguaje hablado, seguramente habrán de decir muy poco a mis lectoras y lectores, y hasta pudieran ser motivo de entretenimiento para mentes avispadas, dadas a entretenerse haciendo "calembourgs" idiomátlcos con estas iniciales. Pero escrito con todas sus letras y explicado que el P. de la C. número 686 es el Proyecto de la Cámara número 686, aprobado por unanimidad por este alto cuerpo legislativo ante el cual fue presentado por el representante Eduardo González Geigel para disponer la construcción de un gimnasio y una piscina olímpicas, arreglo del parque de pelota del Escambrón, y asignación amplia para entretenimiento y envío de futuras delegaciones Olímpicas al exterior, estos signos adquieren enorme interés público, y pasan a ser una cuestión de vida o muerte en nuestras futuras actividades deportivas, asi como punto de Interrogación en nuestra vida de pueblo civilizado.

Fresca aún la reciente experiencia que nos dejara el envió de nuestra gloriosa delegación atlética a las Olimpiadas celebradas en Panamá, "Cuando los fondos necesarios para el digno sostenimiento de la misma fueron motivos de contribución pública, ésta es la hora que todavía estos fondos dan que hacer en el seno mismo de nuestra Comisión de Recreo y Deportes Públicos, donde por alegar unos que la contribución publica fue innecesaria, y sostener otros, que más que necesaria, fue imperiosa, las relaciones entre los señores comisionados no son todo lo cordiales que exige la buena marcha de los deportes, y varios proyectos dé utilidad pública, (el Monumento a nuestros Atletas Olímpicos, por ejemplo) se hallan durmiendo el sueño de los justos en las empolvadas gavetas da los escritorios desiertos, sin que los señores Comisionados den señales de vida en una u otra forma.

El proyecto de González Geigel, al matar de raíz todas estas pequeñas incidencias, provee para Puerto Rico edificios y útiles para la posible celebración de unas futuras Olimpiadas en Puerto Rico, Olimpiadas que al lógico correr del tiempo tendrán que forzosamente celebrarse en Puerto Rico, ya que el reglamento Olímpico claramente especifica, que mientras cualquier país solicite la sede para la celebración de los próximos juegos, éstos no podrán celebrarse en país alguno ue anteriormente haya sido sede de los mismos.

Y no solo es bueno el proyecto por la medida previsora que nos pone en condiciones de ofrecer a los pueblos hermanos sitio ideal para solaz del espíritu y ejercido del músculo, colocándonos de paso, a la cabeza de la América Hispana en estas cosas del deporte, sino que además de ofrecer estas ventajas, y adelantar construcciones que más tarde necesariamente tendrían que ser aprobadas, si es que deseamos seguir cultivando los deportes, ofrecería a los atletas boricuas cómodo gimnasio y modernos útiles de entrenamiento donde practicar las distintas actlvidades deportivas que más tarde habrían de traer lustre y gloria al nombra de nuestra isla, con tanto o mayor auge como el alcanzado en Panamá por nuestros heróicos y gloriosos muchachos, que sin contar con el beneficio de gimnasios, útiles y otros elementos Imprescindibles a una buena preparación deportiva, se superaron a si mismos y derrotaron campeones, superaron marcas, y trajeron a Puerto Rico el más . brillante triunfo deportivo de nuestra historia, tanto más halagüeño por ser menos esperado.

iQue otra cosa puede hacer nuestra Cámara de Representantes y nuestro Senado Insular, sino premiar esta gloriosa hazaña, aprobando al proyecto del representante González Géigel que provee mayores facilidades para estos mismos atletas, y quién sabe si para nuestros propios hijos, cumpliendo el precepto divino de honrar a aquéllos que a nosotros nos honraron...?

Por el bien del deporte... Por el bien de Puerto Rico... y por el bien y el futuro de esa juventud de la que nos enorgullecemos actualmente, esperamos que el Senado Insular apruebe unánimemente el proyecto número 686, en la seguridad de que el mismo será uno de los proyectos que con su firma prestigiará nuestra primera autoridad civil.