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Los trabajadores de los muelles
se reunieron ayer por la mañana en el Teatro Eureka, de Puerta de
Tierra, bajo la presidencia del señor C. H. Fernández, presidente del
Comité de Huelga, con el objeto de presentar al señor Frederick Myers,
presidente del Comité de Distrito de Nueva York de la Union Nacional
Marítima y delegado de la C. I. O., quien vino por la vía aérea a Puerto
Rico a investigar el movimiento huelgario de los muelles.
El señor Myers dijo que era portador de un mensaje de buena voluntad de
todos los marinos afiliados al Comité de Organización Industrial cuyos
miembros estaban dando la cooperación más decidida al movimiento
huelgario de los muelles en Puerto Rico, para ayudar a ganar la huelga.
Declaró el señor Myers que los marinos de a bordo no darían vapor para
que rompehuelgas pudieran trabajar y manifestó que esperaba que pronto
fuera una realidad una unión marítima "fuerte e indivisible en Puerto
Rico". Aconsejo el señor Myers a los trabajadores que continuasen en la
lucha sln cuartel pero sin violencia".
Que no se amilanare nadie y que mantuvieran los piquetes frente a los
muelles para no dejar pasar rompehuelgas, fue el último consejo que dio
el señor Myers a los trabajadores.
El organizador de la C. I. O. en San Juan, señor Fred M. Small, dijo que
ya la Grace Line había ofrecido a los trabajadores 60 centavos hora por
carga general lo que indicaba que los navieros estaban ansiosos de
arreglar el conflicto. Small condenó el hecho de que un huelguista
hubiera golpeado a un rompehuelga en el muelle Núm. 1 y aconsejó a los
huelguistas que no llevaran armas prohibidas para evitar fricciones con
la Policía.
Se leyó un telegrama enviado por los marinos del vapor "Emilia",
afiliado al C. I. O., quienes se solidarizan con la huelga. Hicieron
uso de la palabra a nombre del C. I. O. también otros oradores, entre
ellos el presidente de la Unión Marítima de Puerto Rico, señor Rogan,
quien hizo hincapié en que ningún barco trabajaría hasta tanto se
arreglara esta huelga a entera satisfacción de los obreros en huelga, ya
que "una injuria para uno de ellos significaba una injuria para todos
los unionados".
Uno de los delegados sugirió que se estableciera en Puerta de Tierra un
sistema de comedor abierto para los huelguista como se hace en los
Estados Unidos.
Se aludió a la conferencia celebrada en Fortaleza en la cual el
comisionado del Trabajo, señor Rivera Martínez, propuso que se fuera a
una tregua y que se reanudaran las conversaciones, y la asamblea por
unanimidad, repudió la proposición.
Los líderes de la American Federation of Labor fueron criticados
duramente por el delegado Hermenegildo Concepción, quien dijo que los
trabajadores de los muelles estaban huérfanos de representación de la
Federación Libre en este momento de lucha; que "los líderes de la A. F.
L. les habían abandonado cuando ellos se lo debían todo a los
trabajadores".
Esta acusación fue contestada por Francisco Benítez, miembro del Comité
de Huelga, quien dijo que no era cierto que los huelguistas estuvieran
huérfanos de representación en estos momentos de parte de la Federación
Libre puesto que en la Comisión de Mediación estaban Gabriel Blanco y
José Méndez que representaban a los trabajadores y que en el comisionado
del Trabajo Rivera Martínez los obreros tenían a un hombre de gobierno
pero además a un líder federacionista.
Volvió a hacer uso de la palabra Concepción para decir que el Consejo
Ejecutivo de la Federación Libre a estas horas no se había reunido para
tomar acuerdo alguno respecto al movimiento huelgario y que en la
asamblea que se estaba celebrando no había ningún representante oficial
de la A. F. L | Estas declaraciones de Concepción fueron objeto de
estruendosos aplausos de parte del público numeroso. Entonces Concepción
dijo que por falta de representación oficiosa de la Federación Libre
ellos se sentían ya C. I. O.
El presidente de la asamblea hizo constar que no era el momento oportuno
para dividir los trabajadores en dos grupos; que el momento era en
unificación para ganar la huelga. Que una vez ganado el conflicto se podía
someter a otra asamblea la cuestión de si los trabajadores deseaban
seguir afiliados a la U. T. M. o al C. I. O.
César Andréu abundó en iguales declaraciones diciendo que los amigos de
los trabajadores eran los que los venían a ayudar cuando estaban en
plena batalla, y cuando planteó nuevamente a la asamblea si se aceptaba
la tregua según había sido propuesta por Rivera Martínez en la
conferencia de Palacio, la asamblea por unanimidad volvió a repudiar la
proposición.
Esta asamblea terminó cerca de las once de la mañana.
LAS CONVERSACIONES SE REANUDAN HOY:
El presidente de la Comisión de Mediación y Conciliación Lcdo. Luis
Villaronga nos informa que ha citado a los representantes de los
patronos y a los representes de las uniones de trabajadores de los
muelles para una reunión que habrá de comenzar hoy a las 9:00 A. M. a
fin de reanudar las conversaciones en torno a los pliegos de demandas
que sometieron las dos uniones a las compañías navieras.
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