La historia de las Hermanas de Notre Dame en Puerto Rico empezó hace 50 años cuando el trasatlántico Brazos llegó a la Isla trayendo a bordo a 11 Hermanas. Venían destinadas al Colegio San Agustín de Puerta de Tierra que consistía de una
escuela de 15 salones de clases recién construida, una iglesia y un convento en construcción y una matricula de
500 estudiantes.
Las noticias de ese primer día de clases nos pintan una escena semicaótica de niños y ñiñas que reían y gritaban, saliendo de un salón y entrando en otro desordenadamente, sin comprender por qué quedarse en un solo salón, con una sola maestra, pegados a un escritorio en particular. Minutos
después la callada eficiencia y firme disciplina que caracterizan a las Hermanas de Notre Dame entró en acción.
Desde ese momento comenzó el desarrollo triunfal de las Hermanas de Notre Dame en Puerto Rico. De aquella escuela elemental de sólo cuatro grados. San Agustín se ha convertido en una escuela acreditada de grados elementales y superiores, con un aumento considerable de salones de clase y una cantidad de maestras doble a la original.

Uno de los primeros grupos que se iniciaron en la Escuela Industrial de la Aguja de Notre Dame.
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El éxito de la primera fundación de las Hermanas de Notre Dame fue tal que en en el año 1917 se inauguró en Puerta de Tierra la Escuela Industrial de Notre Dame, familiarmente
llamada la Costura. Su fundadora, Sister M. Timone, de San Agustín, inició este proyecto al contratar a la señorita Carmen Marriera, a quien luego siguió Virginia Cuabas, como Instructora de costura para un pequeño grupo de ñiñas ansiosas de prepararse para trabajar.
El grupo se distinguió en trabajo nativo; más, se le hizo difícil a la directora de la Escuela Industrial el encontrar un mercado apropiado. Madame Louise Lucchetti y
un grupo de amigas se interesaron en el proyecto y pronto
consiguieron una clientela adecuada.
En el 1919 Sister De Leílis y Sister Oscar vinieron a reemplazar a Sister Timone y a Sister Colombiere. Pera
la primavera del 1923, el aumento notable de ñiñas estudiantes hizo forzosa la expansión por lo que una sala
parroquial se convirtió en taller y el antiguo salón de costura pasó a ser salón de venta.
Un Departamento de Servicio Social fue abierto en el 1923 al mismo tiempo que empezaron las clases de costura. Un resultado feliz de esta unión fue la creación de “Las Florecitas" grupo de ñiñas sin hogar, imposibilitadas de permanecer en un orfelinato que alquilaron una casa apropiada cerca de la "Costura" donde trabajaban a diario.
Como resultado de un estudio hecho conjuntamente por el Padre Provincial de los Padres Redentoristas y la Madre Provlncal de las Hermanas de Notre Dame se construyó un nuevo edificio de cuatro pisos. El nuevo lugar dio albergue a la nueva Comunidad de Hermanas que trabajaban sólo para la escuela. Las Florecitas, los talleres y salones de venta y otras facilidades domésticas. Otro proyecto de la escuela, las clases de catecismo para niños y adultos de la vecindad funciona aún en la actualidad.
La Escuela del Sagrado Nombre de Jesús, de Caguas, abrió sus puertas el 3 de octubre de 1916 a 226 estudiantes desde kindergarten hasta cuarto grado. El profesorado estaba compuesto de cinco Hermanas: la Superiora, Sister Mary Justilla, Sister M. Veressima, Sister M. Eustace Sister M. Rose y la novicia Mary Peter Clover que daba clases de dibujo y pintura.
Ya para el 1921 se habían completado los ocho grados de escuela elemental y se habían graduado los primeros 11 estudiantes. En el 1923 se añadió al programa la clase
de Ciencia Doméstica para ñiñas y la de Artes Manuales
para niños. La expansión continuó durante los años del 1930 al 1940 y para entonces la matrícula sobrepasó el objetivo
de 500 estudiantes. El día 2 de junio de 1947 marcó una obispo Jaime P. Davis entregó los diplomas a los primeros
graduandos de Escuela Superior del Colegio de Caguas.
Después del 1950 el número de profesoras llegó a 20. Faltaba espacio y, tanto el Convento como la Escuela,
habían llegado al límite de su capacidad. En el 1956, con la construcción de un nuevo edificio escolar para los grados Intermedios y superiores, se solucionó este problema. Durante dos años las profesoras se vieron obligadas a ir del convento a la escuela, pero en 1958 pudieron residir en el convento que se construyó en un piso alto de la Escuela Superior.
La escuela elemental fue aumentando en matrícula poco a poco. Para el arto 1963 los grados desde kindergarten
al sexto habían triplicado su matrícula. De nuevo se necesitó más espacio por lo que se erigió una nueva ala que
ocuparon el quinto y el sexto grados.
El 21 de setiembre de 1921 se inauguró la Academia del Perpetuo Socorro en Miramar con una matrícula de 49 estudiantes. La escuela consistía entonces de un número
de mesas y bancos facilitados por San Agustín, los que colocaron en la parte posterior de la capilla parroquial para el primer grado, en la sacristía para el segundo y
tercero y en el coro para cuarto y quinto. El cuerpo profesional consistía de cuatro hermanas que venían diariamente en el "trolley” desde el Convento en San Agustín. Al año se construyó el edificio que es hoy la Escuela Elemental. Cuatro años después se hizo una casa de madera de dos pisos para las Hermanas y por fin en el 1930 se erigió el Convento actual que tiene tres plantas.
La matrícula en el Perpetuo Socorro creció tan rápidamente que en el 1956 se hizo absolutamente necesario el construir el nuevo edificio escolar de cuatro pisos situado en la esquina de las calles Martí y Central de Miramar. Los grados de primero a duodécimo se doblaron y la matrícula llegó a 1,200 estudiantes aumentando el número de maestras de 12 a 30.
En el 1947 se abrieron dos nuevas misiones llegando a un total de seis en la Isla. Aguas Buenas empezó con un
convento y unos salones rudimentarios. pero hoy se enorgullece de su nuevo edificio escolar de dos pisos y un
tercero que es el Convento, Fajardo también empezó con 43 niños en un pequeño caserón de madera, más hoy enseña a 500 estudiantes en un atractivo edificio. La escuela
superior está establecida en un segundo piso de una tienda local; ya se está construyendo un nuevo edificio escolar en las afueras de Fajardo.
Quizás el local más atractivo es el de la Escuela Superior de Caguas. Esta escuela construida en el I95R, estilo rancho, consiste de un amplio edificio de un piso donde
reciben instrucción mas de 600 estudiantes, del séptimo
al duodécimo grado. Hoy en día las seis e»cuelas tienen una matrícula de más de 5.000, alumnos. Las Escuelas Superiores de Caguas y Miramar están acreditadas por la "Middle State
Association". Empezaron con 15 Sisters en el año 1915 y en 1965 la Orden tiene en Puerto Rico 80 Sisters.
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