esa clase del '22

Miembros de la Clase del 1922 de la Escuela Superior Central, en Santurce, que concurrieron a la reunión, rememoran tiempos pasados en la especiosa terraza. De izquierda a derecha, al frente: Enrique Iriarte, Matilde Quiñones de Frontado, Valentín García de Soto, Luis Brau, América Font, Rafael Montañez, Juan García Betancourt. Segunda fila, Amparo Bou, Héctor Bladuell, Francisco Landrón, Wally Bithorn, Rafael González y Carmen García. (Foto EL MUNDO por Vicente Grande)
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Por Déliz Piñeiro
Redacción de El Mundo
Con el mismo entusiasmo y el mismo cariño que los unió hace más de setenta y dos años se reunieron el domingo algunos de los graduados de la clase de 1922, de la Escuela Superior Central.
La Clase contaba entonces con ciento trece estudiantes entre los que se encuentran figuras muy conocidas en la Isla. Y sólo por una casualidad, fueron trece las primeras personas en llegar a la residencia de la diseñadora Carlota Alfaro, en el sector Club Manor de Rio Piedras.
Aclaremos que Carlota Alfaro no pertenece a la clase. Sucede que su mamá, doña Amparo Bou de Alfaro, es la secretaria de la clase y citó en casa de su hija a sus antiguos compañeros de estudio para recordar viejos tiempos y pasar un rato en franca armonía.
El presidente de la clase en aquella época y en la actualidad es Francisco Landrón Becerra. Sí, el mismo que es dueño de los Laboratorios Landrón, en Santurce.
Doña Amparo Bou recibe muy complacida a sus amigos que llegan, y atiende a las llamadas de otros compañeros a quienes más tarde el presidente pasará a buscar a sus casas. En este labor le ayuda doña Carmen García, otra de las ex alumnas centralinas que formó parte de esta clase.
Y como es de esperarte todos empiezan a recordar anécdotas y detalles que disfrutaron en sus años mozos, allá para la primera década del siglo 20.
"Nosotros nos graduamos en los Barracones, en Puerta de Tierra. La escuela Superior Central para ese tiempo estaba en construcción, pues cuando ocurrió el temblor de 1918, la escuela vieja, que era de madera, se derrumbó y los estudiantes de carpintería de la escuela construyeron unos barracones en la parada 4 en Puerta de Tierra, en un terreno cercano al Negociado del Tiempo (hoy está la escuela Superior Barbosa). Muchos de los estudiantes que asistían a los Barracones de la Central provenían de la Baldorioty y de la Labra. El ambiente de compañerismo y el respeto entre los estudiantes y los profesores era encomiable. Nos considerábamos como una verdadera familia”, expresa don Rafael Montañez, quien por muchos años trabajó en este diario.
Y recuerda que don Ángel Ramos también estudió en la Central para este tiempo, aunque no se graduó de esta escuela, sino en Fajardo.
se graduaron en el Tapia...
La consejera de la clase fue María Luisa Herrera, quien era además maestra de matemáticas “Para ese tiempo' llegó Mr. Audas para encargarse de la dirección de la escuela. Era muy joven y más tarde luego que nos graduamos venia a las reuniones de la clase. Las clases se enseñaban en inglés menos por supuesto la de español y además se aprendía latín y francés. Creo que aprendíamos más que los estudiante de ahora. Los maestros que teníamos eran excelentes personas y profesores. Recuerdo a don Antonio Sarriera, don Enrique Bustamante, Ana Marín O’Neill y don Esteban Ramírez, entre otros”, expresa doña Amparo quien se mantiene activa ayudando a su hija en la boutique. “Nos graduamos en el Teatro Tapia, en una actividad en donde hubo de todo. Hubo palos y arrestos. Y al otro día de la graduación salió una reseña en el periódico El Mundo escrita por Enrique Ramírez Brau. Ese día de la graduación y mientras el programa artístico ocurría en el escenario, desde el gallinero alguien dejó flotar una bandera de Puerto Rico. El espíritu independentista estaba presente y en esa forma lo demostramos. Vino el jefe de la policía al teatro Tapia, pero gracias a Dios todo quedó en nada. Y soltaron a las personas que habían arrestado”, comenta don Rafael Montañez.
personalidades...
A esa clase pertenecieron don Vicente Géigel Polanco, don Rafael Barbosa (el hijo de José Celso Barbosa), el doctor Basilio Dávila, don Juan Torruellas, entre otros. “Esta clase se ha mantenido unida gracias al esfuerzo y la dedicación de Francisco Landrón Becerra quien se ha dado a la tarea de cultivar la amistad y el cariño que nos unió entonces y nos une todavía. Esta es la clase más antigua que sigue reuniéndose con frecuencia”, expresa Wally Bithorn, senior, quien viaja todos los años desde Miami, en donde reside con su hijo. Está activamente en el negocio de agencias de pasajes y es el feliz abuelo de diecienueve nietos y siete bisnietos.
Además de las personas mencionadas asistieron a esta reunión Valentina García de Soto, América Font, Rafael González, doctor Héctor Bladuell, Luis Brau, Juan García Betancourt, Matilde Quiñones Frontado y Enrique triarte Miró. Esperaban la llegada de Esther Almeira, Angelina Gómez y Mercedes Gorbea. Por fin la nueva Escuela Superior Central abrió sus puertea y la primera clase en graduarse del Palacete, con sus grandes columnas y su hermosa fachada fue la de 1923, a pesar de que terminó de construirse la escuela en 1925.
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