Avenida de la Constitución acogerá estatuas del Paseo de los Presidentes"


Relieves de una de las partes del conjunto “Plaza de la Identidad” de José Buscaglia.

Por Jorge Rodríguez, ESCENARIO
13 de septiembre de 2008

Al soslayar en importancia, la instalación de la "Plaza de la Identidad" del maestro escultor José Buscaglia para dar paso al "Paseo de los Presidentes", el propio presidente del Senado de Puerto Rico Kenneth McClintock ofrece su ubicación en forma lineal a la orilla de la avenida Constitución, instalando la primera del presidente Harry S. Truman, que será develada por su nieto en el mes de octubre, restando por instalar las de Roosevelt, Hoover, Eisenhower, Kennedy y Ford.

Señala el maestro Buscaglia que la ubicación de estatuas o de cualquier monumento conmemorativo de carácter permanente en cualquier espacio público, inevitablemente le presenta al espectador un mensaje específico de significado real y simbólico, más aún, en un espacio tan sensitivo como los jardines del Capitolio.

Todo esto invade lo que implica el lugar de ubicación del paseo presidencial con relación a la plaza que representa la "Identidad puertorriqueña". "Primero, el tramo de la avenida directamente frente al Capitolio identificado por ley como la Avenida de la Constitución, hace referencia a la constitución del presente ordenamiento jurídico que establece el Estado Libre Asociado.

Al colocar a todo lo largo de este predio ceremonial —el de mayor significado político y existencial de todo Puerto Rico— estatuas de presidentes americanos, anula y contradice su significado como Avenida de la Constitución. Resulta lógico el asumir que, luego de ubicadas las estatuas de los presidentes, la intención es la de cambiar de un plumazo el nombre de dicho tramo de la avenida al de ‘Paseo de los Presidentes’: un nuevo nombre, una nueva definición del estado de derecho", declara Buscaglia.

De ubicarse la "Plaza de la Identidad" en el predio de terreno entre la Plaza Manuel Zeno Gandía y el Monumento a los Caídos, en el Paseo Covadonga, como se ha informado desde estas páginas, como segunda opción a la Loma de los Vientos, el Altar de la Patria y el relieve representativo de la historia y la cultura vernácula quedarían en un plano inferior y protocolarmente secundario con relación al Paseo de los Presidentes.

Los presidentes americanos quedarían directamente frente al Capitolio y enmarcando el "Monumento a los Caídos" en las guerras de la nación americana en las que han dado sus vidas, en defensa de la metrópolis, los habitantes de una de sus colonias. Por contraste, el Altar de la Patria se ubicaría de frente a un llamado "Paseo" de segunda categoría y de cara a un estacionamiento.

"Es cierto lo que asevera el Sr. McClintock que yo acepté la ubicación de la plaza en el lugar que ellos escogieron. Al momento no había otro remedio para resolver el traslado y ubicación de la obra en Puerto Rico. Sin embargo, no fue hasta esta semana que me entero de la ubicación del Paseo de los Presidentes por encima de y coronando, literal y simbólicamente, la plaza de nuestra identidad.

En definitiva, lo que debe quedar diáfanamente claro es que la ubicación de estatuas de presidentes americanos frente, detrás, sobre o en cualquier lugar de los predios capitolinos no procede. Particularmente, lo que ésto representaría en el lugar más privilegiado y de mayor jerarquía en Puerto Rico es una aberración y un insulto a nuestra dignidad, así como una contradicción directa a todo lo que significa la Plaza de la Identidad", agrega el celebrado artista.