Y hablando de Puerta de Tierra
Por Faralán

Tomado de Nostalgias del Viejo San Juan, periódico El Mundo, domingo 27 de julio de 1986


ESPERO me hayan excusado por haberles fallado la semana pasada... y esta vez no puedo echarle la culpa a la computadora. La verdad es que estuve envuelto en la Convención de Mayoristas e Importadores (MIDA) y no pude hacer llevar a tiempo la columna a la buena gente del periódico..."By the Way" la Convención estuvo "de película" y allí, como siempre, me encontré con gran parte de mi "Flan Club" -como dice Tavín Pumarejo- que empezaron a narrar anécdotas y recordar personajes de la vieja guardia...

El Chiqui Farrait, "crakeao", como siempre, me regañó porque no escribo sobre Puerta de Tierra. Inmediatamente le riposté que Puerta de Tierra es un barrio de San Juan, y que no vale la pena hablar sobre eso, como se decía en la loza ¿tú te acuerdas? Pero "ellos" siempre alegan que ese barrio es parte integral de la Capital...


Y hablando de Puerta de Tierra, mis panas, qué mucho se sufría cuando íbamos al Teatro Lara -ahora Sylvia Rexach- o al Eureka, a ver los episodios de "La Araña", o las películas de Bob Steel.
-Míster. cómo cocoteaba ese maestro- y después de terminar la función teníamos que correr hasta el Capitolio para que los de Puerta de Tierra no nos dieran una salsa... Ahora, cuando ellos iban al Tres Banderas, en el Viejo San Juan, le hacíamos lo mismo. Y el paralelo 38, (zona neutra!), era el Capitolio... Ahí ambos grupos se paraban a cada lado y decían: "¿A que no te echas pá'cá, ah?" ¡Qué muchos guapitos de barrio existían!

Fuera de broma, Puerta de Tierra dio mucha gente buena y distinguida entre nuestra sociedad. Entre ellos Rosado, el gran pintor. Su hijo también, Bolívar, quien además de heredar lo de la pintura, es un gran músico. Desde luego, a nivel de "charanga", uno, dos y tres y el que no siga el compás estaba botao... pero se bailaba muchísimo con él y su agrupación. El tiene unas cuantas anécdotas, las cuales vamos a mantener en secreto por ahora...

Y, ¿qué tú dices de Tuto Marchand, ahora el gran Comisionado de Baloncesto, que cuando chamaco no era bueno ni jugando bolita y hoyo, pero siempre fue un gran fiebrú, y se pasaba con una bola de baloncesto en la mano? Aunque dicen los que saben allá, en el Falansterio, que nunca ha sabido qué hacer con ella... Pero mire, como abogado y Comisionado, en eso sí es un titán... y buena gente, como todos los del Falansterio. Es más, ¿a que tú no sabes que estos apartamentos fueron de los primeros condominios o residenciales que se vendieron en Puerto Rico...?

Y hablando de edificios de apartamentos, ¿recuerdas que anteriormente, lo único que tenían éstos era un baño común en cada piso para todas las familias que residían en estos apartamientos...? Según me cuentan, era común y corriente ver a la gente haciendo fila, tanto para bañarse como para otras --diligencias", con una tablita en la mano parecida a una dona... y si no sabes para qué era la tablita, yo no te lo voy a decir... Ni te rías tampoco pues eso era parte de la jugada... Si te quieres enterar, pregúntale a Chíqui Farrait, o a cualquier otro de la vieja guardia.

Cuando hablamos de Puerta de Tierra no podemos dejar de mencionar al Gran Eligió, (Q.E.D.). ¿Te acuerdas? El dueño del Bar Fiesta, quien también fue un gran compositor. Entre sus composiciones se encuentra "La Muerte", grabado por el Gran Combo y aunque no bebía ni fumaba, se guillaba de ser un bohemio y, como dicen por ahí, cuando le daba por ser de los bravos, amanecía grave al otro día pues no podía hacer muchos desarreglos.

En la San Agustín fueron muchos los que se castigaron -dieron tragos en su negocio- y se montaron en uno de los primeros taxis, de esa época, que también era propiedad de Eligio. Este era persona muy agradable y muy apreciado en todo el mundo. Prácticamente, un buen Alcalde de Barrio... como se conocían antes.

He recibido una llamada de la presidente de mi "Fan Club", área de Bayamón. Marión Jackson y me ha traído un recuerdo muy bonito de otros, muy conocidos en San Juan... Ya comentaremos en la próxima sobre ellos. También en la Convención me contaron mucho sobre las maldades de Atilano en el Viejo San Juan. Así es que en la próxima lo pienso talar... Porque de él y de muchos otros de nuestra capital, todavía queda muchísimo por contar.