Nació
el 14 de diciembre 1949, en el mismo día y mes de su abuelo materno, el
gran pintor Juan A. Rosado, y así mismo heredó de él su talento
artístico. Johnny, como todos lo llaman cariñosamente, es el menor de
dos varones. Fueron sus padres los puertaterrenses Dolores (Lolita)
Rosado, recepcionista de los estudios de WAPA TV en Puerta de Tierra, y
el recordado José (Pepito) Méndez, empleado de la empresa Esso Standard Oil, y
organizador/dirigente de los equipos de béisbol de pequeñas ligas,
patrocinados por la misma compañía Esso Standard.
Johnny nació y se crió al lado de la Ferretería Méndez de la calle San
Agustín, y posteriormente vivió en los altos de dicha ferretería.
Realizó toda su vida estudiantil en el Colegio San Agustín y comenzó su
vida laboral en las oficinas de la Shell Company. Durante la época del
servicio militar obligatorio, Johnny sirvió dos años en Vietnam, por lo
cual es veterano.
A su regreso estudió en el Colegio Universitario del Sagrado Corazón en
Santurce y comenzó a trabajar con agencias de seguros hasta llegar a ser
Vicepresidente de División.
A través de su carrera profesional, Johnny ganó muchos premios en el
campo de los seguros, siendo reseñados sus logros en los periódicos.
También fue mentor de muchos jóvenes prospectos para los años 80 y 90 en
la única escuela de seguros de Puerto Rico. Incluso ha viajado a países
como Inglaterra y Brasil, entre otros, participando en seminarios
representando a la compañía de seguros para la cual trabajaba.
Johnny contrajo matrimonio en 1975 con la puertaterrense Alicia Vidot,
supervisora de los récords y de los administradores de los cementerios
del Municipio de San Juan, y también nacida y criada en nuestro barrio,
en el F-13 del Residencial Puerta de Tierra. Ambos son padres de tres
hijas y tienen un nieto y una nieta.
Desde que se jubiló en el 2013, Johnny ahora cuenta con más tiempo para
dedicarse a la pintura en su estudio donde siempre ha practicado el
mismo arte que ejerció su abuelo el Maestro Rosado. Es su lugar
preferido y en él ha realizado más de cien cuadros. Cuando era pequeño,
Johnny iba todas las tardes al taller de su abuelo para aprender de él
cómo pintaba. El Maestro Rosado le enseñó mucho, y Johnny es el único
nieto que siguió sus pasos artísticos. “El barrio era mi paraíso. Los
amigos, el colegio, la vida cotidiana, ir a hacerle los mandados a mi
mamá a donde don Leopoldo y don Inés. Puerta de Tierra no era perfecto
pero había un respeto. Recuerdo que en la Farmacia La Mía había un
teléfono y se formaban largas filas que tenían que hacer los muchachos
para llamar a sus novias”, nos dice Johnny con alegría.
Dicen que quien lo hereda no lo hurta, y Johnny heredó del pintor
Rosado, no solamente su talento, sino su amor por nuestro barrio de
Puerta de Tierra.