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Anoche, según lo anunciamos y bajo la presidencia del señor Laguna, coronel coronel tuvo efecto la reunión convocada por varios jóvenes de esta capital y en la cual se trató respecto de la actitud que la juventud capitaleña ha de tomar en las obras del derribo de las murallas.
La asistencia á dicho acto fue numerosísima, contándose en ésta representantes de la prensa, abogados, ingenieros, médicos, comerciantes, empleados, etc. Los acuerdos más importantes que se tomaron fueron los siguientes:
Hacerce cargo personalmente del derribo de la cortina de muralla comprendida entre el castillo de San Cristóbal y el semi-baluarte de Santiago, que será por donde comiencen las obras; organizar una velada literaria con objeto de destinar su producido a costear dos lápidas conmemorativas del derribo de las murallas y en las cuales se esculpirán los nombres de los generales Daban y Marín y el del coronel Laguna.
Fue acuerdo también que los jóvenes que tomen parte en la demolición vistan durante los trabajos, blusa azul de obrero y sombrero de paja del país.
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