Avance
20 de agosto de
1973
Tite Curet Alonso es el compositor
"mimado" de numerosos grupos de salsa, baladistas, y sonetos del
momento. Considerado una autoridad en materia de ritmos latinos, Curet
nos ofrece sus impresiones, en las que sostiene que la música de salsa
no es un fenómeno contemporáneo.
¿Qué tu entiendes por música de salsa?
—Sencillamente un conglomerado de ritmos de tendencia jacarandosa, que
en realidad, siempre han existido. La salsa como ritmo en sí, no existe.
Es más bien un nombre que se le ha puesto a ese conjunto de ritmos.
¿Cuales son exactamente esos ritmos?
-Pues, el guaguancó, la guaracha, el son montuno, la rumba, el mambo, la
pachanga, sólo que con algunas innovaciones en los arreglos.
¿De donde surgió el nombre de "salsa"?
-Fueron los locutores dominicanos los que introdujeron aquí la palabra
salsa. Luego se la escuché frecuentemente a los locutores de las
estaciones de Mayaguez. De ahí comenzaron a usarla diferentes orquestas
como Johnny El Bravo y otras.
¿Como crees que empezó a gestarse esta nueva tendencia?
-Definitivamente los músicos cubanos son los padres de la música que hoy
llaman salsa. Todo comenzó con la llegada de estos grandes músicos a la
ciudad de Nueva York.
La primera generación de músicos boricuas que surgió para fines de la
decada del 40, fueron grandemente influenciados por los ritmos de Mario
Bauzá, Machito y su Orquesta, Luis Varona, todos cubanos. El mambo,
ritmo que causó verdadera sensación en todo Estados Unidos fue
introducido por Pérez Prado, otro gran músico cubano.
A partir de entonces, ante la influencia del jazz y el rock los ritmos
cubanos fueron variando en su estructura rítmica y armónica. Es para
esta época que comienzan a surgir los grandes músicos puertorriqueños
como Tito Puente, Palmieri y otros. Como en Nueva York se hacía más
fácil grabar, se creó un mercado de ritmos antillanos que establecieron
a manera de un "puente musical" entre Puerto Rico y Nueva York. Poco a
poco los músicos puertorriqueños de la urbe neoyorquina comenzaron a
llegara Puerto Rico.
Tal ha sido la influencia de los ritmos latinos de los músicos
puertorriqueños de Nueva York, que inclusive el timbal, que es un
instrumento clave de la música que ahora llaman salsa, fue introducido
en Puerto Rico por los músicos que fueron llegando desde Nueva York.
Aquí se usaba hasta entonces el bongó para el "baqueteo" (ritmo o sonido
que se produce golpeando los cueros conjuntamente con los lados del
bongó). Cuando llegó Tito Puente a Puerto Rico, vemos que ya Nora
Morales era famoso, sin embargo se dedicaba más que nada a tocar rumba.
¿Ves la súbita invasión del trombón de vara y el consiguiente
desplazamiento del saxofón de los arreglos de los nuevos grupos, como
una caracterárica de la música de salsa?
-Bueno, el trombón se comenzó a usar mucho antes de surgir siquiera la
palabra salsa. Lo que sucede con el saxofón es que su sonido,
especialmente el soprano y el alto, acapara demasiado. El trombón además
de confligir menos con el cantante, resulta cómodo para los arreglos.
Cualquier músico con un poco de malicia puede hacer arreglos para
trombón.
En cuanto a los aparentes cambios en el ritmo de las piezas de salsa hay
bastante de tergiversación y confusión. Se han introducido, sí,
muchísimos efectos de sonido y aditamentos electrónicos, y el trombón ha
surgido como elemento clave en los arreglos, pero eso no debe ser
sensacional. Palmieri está usando el trombón desde hace muchísimo tiempo
e igualmente Mon Rivera cantaba sus plenas con acompañamiento de
trombones.
Tenemos que aceptar sin embargo, que el fenómeno de la salsa se está
propagando internacionalmente como una modalidad de la cultura
puertorriqueña. Antes de que se conocieran como salsa, ya se estaban
identificando como puertorriqueños los ritmos afrocubanos que componen
este género. A raíz de la desaparición de Cuba del mercado internacional
de discos, toda esa gama de músicos boricuas, que descollaron aquí y en
Nueva York a partir de los años 40, han asumido la supremacía de lo que
hoy se conoce como salsa.
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