William Marrero
recibe un paquete con comestibles y folletos
informativos de manos de dos voluntarios. Ángel M.
Rivera |
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Se llena de color Puerta de
Tierra
domingo 10 de agosto de 2008
Iglesia
celebra día familiar para esa comunidad.
Por: Por Keila López Alicea
Sonriente, Migsarelie Álvarez observaba mientras una
maquillista dibujaba sobre el rostro de su hermano el símbolo de
una de sus películas favoritas: un murciélago.
Cual si fuera una estatua, el niño de 9 años apenas se movía, sólo
giraba el rostro a petición de la maquillista.
A pocos pasos, su abuelo, Alberto Álvarez, observaba a los niños
mientras disfrutaban del primer día familiar “Impactando con
júbilo la comunidad” en Puerta de Tierra.
“Aquí hacen falta este tipo de actividades, la gente viene aquí y
sólo piensan en lo malo, pero aquí hay que traer cosas buenas para
desarrollar a los muchachos”, expresó Álvarez. Con la intención de
atender esta petición fue que llegaron ayer hasta la comunidad
miembros de la Iglesia Casa de Júbilo, encabezados por su
fundador, Antonio Grillo.
“Esta actividad nació porque queremos impactar con servicio a esta
comunidad... Hay mucha gente que detrás de esas puertas sufren por
las drogas, porque son víctimas del maltrato, de la violencia y
queremos llegar a ellos”, indicó Grillo, quien esperaba que los
deambulantes de la zona y los vecinos de los cuatro residenciales
públicos de Puerta de Tierra llegaran a la fiesta.
Además de payasos e inflables para los niños, en la actividad se
celebraba una clínica de salud y representantes de diversas
agencias de gobierno orientaban a los asistentes sobre los
servicios que ofrecen.
“Venimos porque el gobierno no nos ayuda y lo que quiere es sacar
a la iglesia de su local”, sentenció Antonio Meléndez minutos
antes de sentarse en la silla del barbero, quien fue deambulante
en el área antes de encontrar ayuda en el Ejército de Salvación.
La actividad culminaría en horas de la noche con un espectáculo
musical.
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