Una franja de terreno de aproximadamente
87 acres con sobre mil unidades de vivienda nueva, dos hoteles,
numerosos restaurantes y comercios, plazas urbanas, áreas
recreativas, acceso vial mejorado, y todo de cara al mar.
Éste es el plan a largo plazo para revitalizar el frente
portuario de la Isleta de San Juan que el Gobierno presentará
hoy durante la Cumbre de Desarrollo Económico, que se celebrará
en el Hotel Sheraton Convention Center.
El ambicioso proyecto, que ha sido parte del programa de
gobierno de pasadas administraciones por más de una década, dejó
de llamarse San Juan Waterfront, y ahora se le conocerá como
Bahía Urbana.
“Ningún tipo de redesarrollo de zonas portuarias se ha hecho a
esta magnitud en Puerto Rico y obviamente es algo que va a
transformar el Viejo San Juan, el área de la isleta”, manifestó
el secretario de Desarrollo Económico y Comercio, José
Pérez-Riera, al presentar el plan maestro del proyecto a El
Nuevo Día.
“Eso va a tener un impacto muy sustancial sobre la actividad
económica”, abundó.
Inversión de $1,500 millones
El plan, que ya está en marcha, requerirá durante su fase de
construcción una inversión pública y privada de cerca de $1,500
millones, y se estima que durante esa etapa podría crear sobre
20,000 empleos. En la fase operacional, podría crear en promedio
cerca de 7,100 empleos anuales.
Pérez-Riera destacó, además, que se estima que podría allegar
$170 millones aproximadamente a las arcas del Gobierno estatal y
el Municipio de San Juan.
Por los pasados meses, el equipo económico del gobernador Luis
Fortuño se concentró en evaluar la propuesta del San Juan
Waterfront y efectuar los cambios que entendían pertinentes para
atemperar el proyecto a la realidad actual, con una economía en
su cuarto año de recesión y el mercado de vivienda severamente
afectado.
“Todo plan tiene que atemperarse a la realidad económica en la
que uno se encuentra”, sostuvo Pérez-Riera.
“Yo ni creo que aquello era viable en ese momento”, añadió en
torno a la propuesta presentada durante la administración de
Aníbal Acevedo Vilá, que incluía, entre otras cosas, el
desarrollo de una marina para megayates.
Bajo el proyecto Bahía Urbana, se desarrollarán cuatro
vecindarios: Capitolio Sur, Villa Mercado, Parque San Antonio y
La Marina, que se extenderán desde los muelles 7 y 8 hasta los
predios del Club Náutico, cerca del Distrito del Centro de
Convenciones.
Según concebidos por este Gobierno, cada uno tendrá su carácter
particular, y estarán interconectados por el camino Las
Alamedas, una vía que se extenderá de oeste a este y por la que
transitarán vehículos de motor al igual que peatones.
Las fases del proyecto
Capitolio Sur, explicó Pérez-Riera, será una de las primeras
zonas que se desarrollará, y estará orientada principalmente a
actividades cívicas y recreativas.
Villa Mercado será, según el secretario, “el corazón de Bahía
Urbana”, donde se concentrará la actividad económica con el
establecimiento de un hotel tipo destino y otro tipo boutique,
además de comercios, galerías y restaurantes.
En este vecindario, que será el más grande, ubicará también un
mercado artesanal donde se podrán adquirir productos del país
frescos. Pérez-Riera precisó que actualmente están en
negociaciones con los pescadores de La Coal, que por décadas han
trabajado en la zona, para que puedan vender su mercancía en esa
instalación.
“A largo plazo, esto para ellos va a ser un beneficio”, opinó.
Inmediatamente al este, ubicará la comunidad de Parque San
Antonio, que será predominantemente residencial, al igual que La
Marina, donde estarán localizadas las viviendas de menor costo y
los proyectos de unidades para alquiler.
Según Pérez-Riera, el precio promedio de las residencias que se
desarrollarán a lo largo del proyecto será de $400,000.
El titular de Desarrollo Económico y Comercio estimó que no será
necesario expropiar ninguna propiedad, y aseguró que las
comunidades localizadas al norte de la avenida Fernández Juncos
serán integradas a las actividades que se realizarán en Bahía
Urbana.
Respecto a la conservación de áreas verdes, indicó que el plan
contempla mantener 37 acres, pero que éstos, en lugar de estar
concentrados en un gran parque, como se había contemplado el
pasado cuatrienio, estarán segregados y distribuidos
principalmente en las áreas residenciales.
El proyecto de revitalización es un plan a largo plazo, pero
Pérez-Riera se mostró confiado en que su desarrollo se
completará en menos de 20 años, como se había calculado
originalmente.
La obra arranca este año
En agosto, se aprobó la Declaración de Impacto Ambiental, y a
principios de este mes, la consulta de ubicación.
La primera fase del proyecto se comenzará a construir este mismo
año a un costo de $25.5 millones del Plan de Estímulo Criollo.
La primera etapa incluye mejoras a la avenida Fernández Juncos y
el acondicionamiento de los muelles 7 y 8, con áreas verdes para
actividades culturales y recreativas, un puente peatonal que
conecte con el muelle 6, el establecimiento de una filial del
Trapeze School New York para entrenar trapecistas, un
observatorio y la llegada del buque H.M.S. Bounty entre
noviembre y abril de cada año para servir de atractivo
turístico.
A la vez, se desarrollará el extremo este de Bahía Urbana, donde
se construirán áreas recreativas dirigidas a la familia. “La
idea es que empiece a generar actividad”, subrayó Pérez-Riera.
|