miércoles, 31 de julio  de 2013
¡Ay mamá, que clase de coladero en el Capitolio!
Capitolio enchumbao
Se invertirán millones para acabar con los problemas de filtraciones.
 

Por Gerardo Cordero/Primera Hora


Huecos en las paredes, grietas en el techo, humedad y cintas amarillas rodeando las estatuas de figuras ilustres, es el panorama que reina en la Casas de las Leyes, donde las filtraciones se han convertido en la orden del día.
Y si es uno de esos días lluviosos, tan comunes en nuestra Isla, además de los rótulos de que camine con precaución, las filas de zafacones y baldes para recoger el agua hacen patente la magnitud del problema.
En algunas oficinas, computadoras y otros equipos cubiertos por bolsas plásticas también sugieren el alto riesgo de humedad latente.
Fueron precisamente los torrenciales aguaceros de junio y julio que sirvieron para revelar de forma dramática la magnitud del problema de filtración que existe en el techo del Capitolio.
Lo que empezó con goteras cayendo desde el techo se transformó en chorros de agua que provocaron grandes charcos en pasillos del tercer nivel, cerca al área de la rotonda. De inmediato, personal de la Superintendencia del Capitolio puso en vigor un plan de contingencia que incluye tareas de sellado provisional en algunas áreas.
Sin embargo, un proyecto abarcador de reparaciones está por encaminarse, según confirmó Javier Vázquez, superintendente del Capitolio, quien reconoció la importancia de corregir las deficiencias de la edificación, que es visitada por miles de turistas mensualmente.
“Aquí está parte de la historia de este país y es una pena que se deteriore, pero esa es nuestra encomienda, protegerla”, sostuvo Vázquez al destacar que, por estar ubicado en una isleta, el salitre y los vientos impactan de forma severa la estructura por todos sus flancos.
Vázquez dijo que su oficina se encuentra en la fase de diseño del citado proyecto y, una vez se identifiquen los fondos, se procedería con la subasta para iniciar las reparaciones. Posteriormente se comenzarían las restauraciones de frisos y rosetones afectados por el agua y la humedad, debido a las grietas en el techo, agregó el funcionario.
Durante un recorrido junto a Vázquez y el ingeniero Héctor Vélez, director del área de proyectos de construcción de la Superintendencia del Capitolio, pudo observarse, entre otras deficiencias, un hueco de más de seis pulgadas en uno de los rosetones cercanos a la cúpula, justo en la parte más emblemática y hermosa del edificio.
En el pasillo del tercer piso las cintas amarillas y otros rótulos para solicitar cautela al caminar por esas zonas identifican áreas de filtraciones.
Mientras, en el segundo piso, donde están ubicadas las estatuas de figuras ilustres como los ex gobernadores Luis Muñoz Marín y Luis A. Ferré, la reubicación de las esculturas, marcadas por cintas amarillas, reflejan otra zona en la que se están sustituyendo ventanas deterioradas por la corrosión.
En ese sector, Vázquez explicó que se han instalado nuevas ventanas con marcos de bronce y precisó que al presente, durante el receso legislativo, se procura agilizar al máximo esas reparaciones, así como mejoras en otros edificios que pertenecen al llamado Distrito del Capitolio.
Se trata de casi una veintena de estructuras que incluyen los edificios de Medicina Tropical, también de gran valor histórico y el bautizado en honor a Baltasar Corrada, donde actualmente se sustituyen alfombras de área por losas en los pisos de oficinas de varios senadores y de otros departamentos legislativos.
El superintendente del Capitolio evitó ofrecer un estimado del costo de la reparación del techo capitolino, pero fuentes legislativas anticipan que será una inversión millonaria e impostergable.
“...Estamos en el proceso de diseño y una vez el diseño esté completo se va establecer cuánto es el costo del proyecto", dijo.
Para la reparación de los techos en el Capitolio, Vázquez reconoció que se consultará a la Oficina de Preservación Histórica.