En manos del pueblo puertorriqueño los restos de Ramón Power y Giralt
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El cónsul de España, Eduardo Garrigues, agradeció "al gobierno, al pueblo de Puerto Rico y todas las instituciones presentes por haber impulsado este acto importante".
Por Antonio R. Gómez
Primera Hora
6 de abril de 2013
Los restos del prócer puertorriqueño Ramon Power y Giralt están ya en posesión del pueblo de Puerto Rico tras el traspaso formal que hizo en la mañana de hoy sábado el Ayuntamiento de Cádiz al gobernador Alejandro García Padilla.
En representación del Ayuntamiento de Cádiz viajó a la Isla el teniente alcalde Juan José Ortiz Quevedo, quién participó de la ceremonia junto con el cónsul de España en Puerto Rico, Eduardo Garrigues López, y el comandante del buque español Juan Sebastián Elcano, Alfonso Gómez.
La ceremonia solemne se inició en horas tempranas de la mañana cuando el buque español entró a la Bahía de San Juan escoltado por una nave de la Guardia Costera de Estados Unidos. Al llegar frente a El Morro, desde el barco se hicieron 21 cañonazos en saludo, que fueron respondidos con igual número de cañonazos desde tierra.
Ya en puerto, el barco y su esperada carga fueron recibidos por el secretario de Estado, David Bernier, el Arzobispo de San Juan, Roberto González Nieves y el cónsul de España. Estos encabezaron una procesión hasta el Arsenal de la Marina en La Puntilla, en la que marinos del buque español cargaron la urna, envuelta en la bandera española, con los restos del prócer. Fueron acompañados todo el camino por la banda militar.
Ya en el Arsenal de La Puntilla, les esperaba el gobernador Alejandro García Padilla y la primera dama, Wilma Pastrana, presidenta honoraria del comité que trabajó esta última etapa del traslado de los restos de Power Giralt a Puerto Rico.
Culminada la ceremonia de entrega de la urna con los restos, se realizó otra caminata que, a bordo de un carruaje movido por un hermoso caballo, llevó los restos de Power Giralt, ahora cubiertos por la bandera de Puerto Rico, hasta la que fuera su residencia en la calle Tetuán del Viejo San Juan.
A la llegada al lugar una lluvia de pétalos que caían desde un balcón cubrió el carruaje, mientras un cuarteto de tres violines y un violoncelo interpretaba una danza puertorriqueña.
Completada la ruta trazada para el Viejo San Juan, la comitiva se dirigió hacia El Capitolio, donde la Asamblea Legislativa de Puerto Rico recibió los restos del prócer puertorriqueño con una lucida ceremonia en la rotonda que tuvo mensajes de los presidentes de ambas cámaras, el senador por San Juan, José Nadal Power, en representación de la familia Power, el comandante del buque escuela Juan Sebatián Elcano, Alfonso Gómez, y una guardia de honor de los legisladores presentes.
“Un tiempo concluye pero un tiempo inicia. Cuando Power partió hacia Europa en 1810 esta isla era lugar de transición. Las fuerzas de la historia se hacían sentir y hacían sentir voluntad de cambio”, dijo el gobernador durante su mensaje en la ceremonia.
“Hoy a su vuelta, Ramón Power encuentra también una tierra en transición. Nos toca a esta generación convocar, como lo estamos haciendo, y resulta a esta generación escuchar la convocatoria, a un esfuerzo de país que nos encamine a nuevas prosperidades económicas y sobre ellas a nuevas fuerzas en el espíritu de los puertorriqueños”, agregó.
“Ahí, en esa embarcación, junto a los restos de nuestro primer abanderado, a la vez que regresan dos siglos de historia y espera, regresamos nosotros mismos como país”, expresó por su parte el presidente de la Cámara, Jaime Perelló.
“Esta es la casa del pueblo…El sitio correcto para traer al primer diputado de Puerto Rico y rendirle un breve, pero merecido homenaje por su gesta hace ya sobre 200 años”, expresó el presidente del Senado, Eduardo Bhatia. “El honor es más grande para el Senado de Puerto Rico porque uno de sus herederos, uno de sus parientes, es el senador diputado por San Juan, el senador Jose R. Nadal”, dijo.
“En esta ocasión en este año 2013 estamos especialmente orgullosos de estar aquí por haber tenido la suerte de recibir la orden del ministro de trasladar los restos mortales del primer prócer de Puerto Rico, don Ramón Power y Giralt. Para nosotros es un privilegio el haber tenido la ocasión de trasladar sus restos mortales a Puerto Rico”, declaró el comandante del buque escuela.
El cónsul de España, Eduardo Garrigues, agradeció “al gobierno, al pueblo de Puerto Rico y todas las instituciones presentes por haber impulsado este acto importante, que es una pieza más en el eslabón ya centenario que une nuestros dos pueblos”.
“Al oír esta mañana las salvas por los cañonazos disparados en El Morro, hemos sentido vibrar en nuestro interior los fuertes vínculos que han unido y siguen uniendo a España y a Puerto Rico”, declaró.
Los restos estarán hasta mañana en el Capitolio, desde donde se trasladarán a la Catedral de San Juan. De ahí pasarán al Departamento de Estado para ser llevados eventualmente a su destino final, en la Catedral de San Juan.
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