Abogado afirma que nunca se opusieron al deslinde.

El abogado del desarrollador de Paseo Caribe, Luis Sánchez Betances, calificó como “otro triunfo judicial” para su cliente la decisión del juez Carlos Dávila Vélez de permitir en forma condicionada el deslinde de la zona marítimo terrestre (ZMT) en el área en que ubica el proyecto.

Sánchez Betances dijo que Dávila Vélez entendió su planteamiento de que el propuesto deslinde era “una maniobra” para establecer por vía administrativa que los terrenos ganados al mar son parte de la zona marítimo terrestre.

Sánchez Betances sostuvo que su argumento prevaleció al disponerse que el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA) no puede aplicar en dicho deslinde la Ley de Muelles y Puertos de 1968, según la cual la ZMT incluye los terrenos ganados al mar.

“Nunca nos opusimos a que se hiciera el deslinde”, dijo Sánchez Betances sobre el hecho de que la sentencia autoriza el procedimiento. Agregó que lo que siempre planteó es que no se podía hacer el deslinde sin el debido proceso de ley ni alterando los derechos de propiedad.

Por su parte, el secretario de Justicia, Roberto Sánchez Ramos, declaró que su agencia se encuentra “estudiando la decisión para determinar el próximo paso a seguir”.


Asoma otra controversia

Una vez resuelto por el Tribunal Supremo que los terrenos ganados al mar pertenecen a San Gerónimo Caribe Project (SGCP), opositores al proyecto han planteado que aun así se podría determinar que algunas edificaciones están construidas ilegalmente. El argumento es que parte de lo edificado no guarda la distancia de la ZMT requerida por reglamentos de la Junta de Planificación (JP) y otras disposiciones.

El licenciado Pedro Saadé explicó que la servidumbre de salvamento y vigilancia es de 20 metros a partir de la ZMT y hay otros 30 metros adicionales por reglamentos de la JP.

“No tengo dudas de que a partir de la ZMT, aun aceptando como bueno que son patrimoniales los terrenos ganados al mar, aun así hay violaciones a las servidumbres y restricciones de los reglamentos de la JP”, dijo Saadé. Agregó que con el nuevo deslinde en Paseo Caribe la situación “se podrá determinar con más claridad”.

Por su parte, Sánchez Betances indicó que lo que aplica allí es el reglamento 23 de la JP, el cual dispone que la servidumbre de vigilancia es de seis metros y el paseo que bordea el predio tiene de ocho a doce metros de ancho.

“Lo de 20 metros de salvamento es para la eventualidad de un desastre marino, que haya un espacio para poner las cosas que se recuperan de un navío”, explicó Sánchez Betances