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Tributo senatorial a los policias


viernes, 25 de febrero de 2011
 
Honran a los 400 caídos mientras cumplían su deber  

Por Yaritza Santiago / El Nuevo Día

Un silencio reverente arropó por un instante la Plaza de los Policías ubicada en la Avenida Constitución, en el lado sur del Capitolio.

De repente, fue interrumpido por una salva, seguida por una nostálgica melodía conocida como el “Toque del Silencio” -que se toca cuando muere un policía o soldado-, interpretada por un trompetista de la Policía.

Este fue el preludio de la ceremonia de corte de cinta del Monumento al Policía, que fue inaugurado ayer en tributo a los 400 hombres y mujeres que han perdido sus vidas en el cumplimiento del deber. Además, rinde homenaje a los miembros activos de la Uniformada.

“Este monumento reconoce la importante labor que realizan diariamente los miembros de la Policía, cuerpo que representa y simboliza la democracia”, sostuvo el presidente del Senado, Thomas Rivera Schatz, ante un centenar de invitados.

“Ellos, los policías, están presentes en un momento de tensión en el que hay personas que quieren hacer una protesta o tienen partes encontradas y crean ese fino balance para que ambas partes puedan expresarse libre y democráticamente”, apuntó el legislador.

La obra fue diseñada por el artista plástico Angel Nevárez Ríos. Consiste de una escultura obelística, parecida a la que rinde tributo al ex presidente George Washington en la capital federal, pero mucho más pequeña.

La escultura tiene cuatro lados y termina con una punta piramidal que penetra un gran anillo que simboliza el Sol. Según el texto que está grabado sobre el granito negro en el obelisco, esta obra llamada “Tején” significa defensa y representa al cuerpo policiaco.

La base del obelisco incluye una tarja con los nombres de los presidentes de las organizaciones que agrupan a los policías y los nombres de los 24 superintendentes de la Policía, incluido el incumbente, José Figueroa Sancha.

Monumento costó $750,000

Al obelisco le hacen compañía dos gigantescos paneles en granito donde están grabados los nombres de los 400 policías caídos en el cumplimiento del deber. El proyecto completo conllevó una inversión de $750,000.

En la ceremonia estuvo presente el gobernador Luis Fortuño, quien exaltó las diversas tareas que realiza el cuerpo policíaco.

“La Policía se ha destacado en varios frentes enfrentando la ola de crímenes que nos acecha, atacando el trasiego de drogas, y manteniendo las leyes del tránsito”, dijo. Además, resaltó que la Uniformada se ha convertido en un eje de transformación social con programas como la Liga Atlética Policíaca.

Durante el evento tanto Rivera Schatz como Fortuño y la presidenta cameral, Jenniffer González, arremetieron contra las personas que critican al jefe policiaco y reiteraron su compromiso para mejorar las condiciones de trabajo de los policías, incluido un aumento salarial.

Mientras, Figueroa Sancha expresó que el monumento, que fue un sueño del presidente de la Asociación de Miembros de la Policía, José Taboada de Jesús, rinde tributo a quienes llamó héroes “por poner en riesgo sus vidas para llevar a cabo su misión”.

defiende la obra y el evento

Rivera Schatz sostuvo que se tiene que establecer un plan de acción para que el asunto de los traslados, del pago de horas extra, de la revisión salarial y de las condiciones adecuadas de empleo también sean motivo de felicidad y no de angustia para todos los policías.

Por otro lado, Rivera Schatz manifestó que desconoce el costo total de la actividad de ayer, pero aseguró que no conllevó gastos excesivos y que fue prudente hacerla, a pesar de la difícil situación económica y fiscal que atraviesa la Isla.

“No hay gastos extraordinarios, deberían ser mínimos pues se usó personal del Senado y la Cámara y la música fue organizada por la Policía. No sé en cuánto podría computarse pero la obra costó $750,000, y es más que merecido pues rinde tributo a los hombres y mujeres de la Policía de Puerto Rico”, sostuvo.

Plazo a las querellas

Entretanto, pronto irá rumbo a La Fortaleza un proyecto de ley que regula el tiempo que tardarán las investigaciones sobre las querellas de ciudadanos contra los miembros de la Policía.

La medida cameral, que ayer fue aprobada por el Senado, establece un máximo de 180 días para realizar investigaciones y emitir una adjudicación final sobre faltas leves supuestamente cometidas por miembros de la Uniformada.

En el caso de faltas graves, no podrán tardar más de un año.

“Esta ley no pretende buscarles una salida a aquellos oficiales del orden público que atentan contra la confianza que se ha depositado en ellos, sino que busca garantizar que las acusaciones sean atendidas en un término de tiempo prudente”, indica la medida.

El proyecto también establece que, en “casos de circunstancias excepcionales que no estén bajo el control del Superintendente de la Policía”, estos términos podrían extenderse.