martes, 12 de septiembre de 2006
Frances Tirado PRIMERA HORA

ORLANDO.– A sus 35 años de edad Vico C se considera un papá atento y hasta "payaso", que se desvive por sus cuatro hijos con los que creía haber cerrado la fábrica. 

Su noble corazón, sin embargo, lo llevó a integrar un nuevo miembro a la familia: la pequeña Joselyn.

El rapero abrió a PRIMERA HORA las puertas de su hogar, donde evidenció parte de la dinámica diaria que tiene con sus vástagos Luis "Sugar" Armando (13), Luis "Cookie" Gabriel (10), Enni Vilmar y Joselyn, ambas de siete años.

Una muestra de ello fue recibirlos en un ambiente armonioso, con besos y abrazos, cuando en la tarde de ayer, lunes, llegaron de la escuela. A todos les preguntó cómo les fue en el día y les ayudó a preparar la merienda de la tarde. La tarde fue especial, pues "Cookie" trajo sus calificaciones de A y B.

"Mis hijos me aman. Y yo soy un payaso con ellos", reitera el cantante al tiempo que indica que sin ellos su vida no tendría el mismo sentido y sabor que disfruta en esta etapa de madurez en la que se encuentra.

Joselyn, que luce una larga cabellera roja, con una personalidad un tanto coqueta y presumida, se la pasó posando sin inhibiciones ante el lente fotográfico de este diario.

Casado hace once años con Sonia Torres, el creador de "La recta final" revela que la oportunidad de adoptar a Joselyn –de padres puertorriqueños, pero nacida en Filadelfia–, llegó a través de su esposa.

La "jefa de la casa" supo por un familiar que el padre biológico de la chiquilla cedería su custodia a través de la adopción.

Tan pronto vio fotografías de la simpática niña, que apenas habla español, quiso llevarla a la casa.

Pese a que prefiere mantener en privado las razones por las que Joselyn ha sido dada en adopción, el exponente de reggaetón confiesa que en un principio se negaba a adoptarla.

"Le dije que las niñas son más difíciles y que no creía que estábamos preparados", sostiene el también padre de Marangely, de 16 años, procreada en una relación anterior.

SINTIÓ TEMOR

Aunque siente estar en la mejor etapa de su vida y más maduro, Vico C asegura que "me dio temor meterme en eso (de la adopción). Como estaba de viaje, cuando regresé vi la foto que me la enseñó Enni. Y me empecé a hacer preguntas sobre lo que ella (Joselyn), tan pequeña, estaba viviendo".

"Me conmovió que ella estuviera en un hogar desde el que estaban llamando para dar seguimiento a todo. Sonia se me sentó en la falda y empezó a sobarme y le dije: '¿Por qué tú me haces ésto?' Y empecé a llorar. Sonia me preguntó qué me pasaba. Y le dije que este mundo está bien jodío. Salí a fumar frente a la casa y hablé con Dios para que me dijera si me convenía hacer eso. El miedo y el sentimiento me hicieron llorar", narró con emoción desde su sofá rojo.

Le pidió una señal a Dios, de esas que dice implorar cuando necesita aliento para tomar decisiones. Y no fue hasta que recibió la llamada del rapero Gerardo Mejías, que obtuvo la respuesta.

Según Vico C, Gerardo Mejías, recordado por su hit "Rico, suave", es una persona bien madura como hombre y en la palabra de Dios. Por eso se sintió en la confianza de contarle su indecisión. 

"Él me dijo: 'Viejo, Dios brega con el corazón'. Y también que él y su esposa no podían tener hijos. Ahí es que reflexioné", detalló quien decidió entonces recibir a la pequeña, que es locura con él.

Hace cuatro meses, estando en Puerto Rico en la filmación de la cinta "Reggaetón", producida por Jennifer López, su esposa Sonia Torres lo sorprendió en el hotel con toda "la tribu" para que viera por vez primera a Joselyn. 

Sus lágrimas afloraron de inmediato al verla. "Siento como si ella fuera mía. He aprendido algo, que tiene más peso el papel de padre que la genética. El rol es lo más importante y eso incluye los sentimientos y el cariño", precisó.

Describió a Joselyn como una niña extrovertida, que cuenta con amor, cariño, educación y calor familiar. Y desde ya se preocupa por darle apoyo sicológico para que no se sienta diferente.

CELOSO Y PROTECTOR

El "Filósofo del Rap" es un papá celoso y sobreprotector, en especial con sus hijas Marangely y Enni, y ahora con Joselyn.

"Es como la relación de novios, porque dice que la relación de padre a hija es más especial que la de los varones, que no son igual de cariñosos. Las nenas quieren besos y quieren a papi. Y los nenes quieren algo de papi", cuenta. 
Ante los males sociales que aquejan a la sociedad, dijo que "vivo con miedo porque mis hijas son preciosas y en la Florida hay mucho enfermo sexual".

"Si salen de la casa a jugar, estoy pendiente y les digo que hablen alto para escucharlas. Ahí es que Joselyn está feliz, porque (tiene un timbre de voz) que parece una alarma", narró.

VALORES Y AMOR

Para el intérprete es de suma importancia fomentarles a los hijos una crianza colmada de valores.

"Me interesa más enseñarles lo importante que es la amistad, los valores, la lectura y el compartir en familia. Les quiero dar las cosas que yo no tuve, pero no en exceso", dijo dejando escapar su mirada hacia su prole.

Se remontó a la época en que se criaba para comentar que "en mi casa, se querían a los perros. Éramos pobres. Los días 20 se acababa todo por los cupones para compra. Mami cocinaba chévere, pero no constante. El ravioli era el caviar del caserío y en casa no había".